
¿Alguna vez has deseado haber nacido en otro país que no sea en el cual naciste? Quizás has pensado alguna vez, si yo hubiese nacido en Europa, en Inglaterra o en Estados Unidos, pero no fue así, naciste en donde Dios quiso que nacieras.
Algunos hacen todo lo posible, por difícil que sea, por pertenecer a otro país y hacen lo que conocemos como residencia o ciudadanía teniendo así que asumir ciertos compromisos como ese país al cual juraron y decidieron pertenecer.
Dios nos ofrece una ciudadanía que es para todos, no tienes que hacer papeleos, ni exige ningún requisito y es ser parte de SU PUEBLO. Si quieres ser parte de país solo tienes que hacer una oración para aceptar a Jesús y dejarlo entrar a tu corazón. Te aseguro que no importa el lugar donde hayas nacido o la ciudadanía que hayas adquirido, nada se compara con pertenecer al pueblo de Dios.
Oración: Señor, gracias por tus palabras porque son las que cada día le dan sentido a mi vida. En el nombre de Jesús, amén.
Aniba e Iverka Burgos
No hay comentarios:
Publicar un comentario