Alguna vez te has preguntado, ¿cómo
saber si Dios está presente aun cuando no lo estés viendo físicamente? Creo que
sí. Muchas veces, no verlo físicamente nos causa la sensación de que Él no está
presente, de que está lejano, de que se ha olvidado de nosotros, de que no le
importamos.
Hace unos días tuve un sueño. Soñé
que un perro chihuahua mordía mi mano, justo donde se unen mis dedos pulgar e índice.
El perrito mordía tan duro mi mano que no podía soltarme de sus garras por más
que lo intentaba y cuando logré despertar de aquella terrible pesadilla (jajajajaja)
tenía un inmenso dolor en la mano como si literalmente hubiese sufrido la
mordida. Tuve que mover y masajearme la mano para disipar el dolor. La
mañana siguiente a aquel sueño, mientras caminaba meditaba en aquel suceso. Como
es posible que puedas sentir algo tan profundo y real aun sin haberlo
experimentado. ¡Sin explicación!
Sabes, así mismo es La
Presencia de Dios. Él está ahí, y aunque no lo puedas ver, Se deja sentir a través de una suave brisa, de los rayos del sol, de su cuidado especial mientras
transitas por el recorrido de la vida. Mira a tu alrededor, contempla Sus obras y veras que aunque no lo puedas
ver, la sensación de todo lo que te rodea grita CON VOZ FUERTE que EL ESTA
AHÍ. Dios está a tu lado y nunca
se apartará de ti. ABRAZA SU HERMOSA PRESENCIA, PORQUE SIN DUDA ALGUNA, EL ESTA AHÍ.
EXODO 33:14: Y él dijo: Mi presencia irá contigo,
y te daré descanso.
SALMOS 139:7-10: ¿A
dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde
huiré de tu presencia? Si subiere a los cielos,
allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi
estrado, he aquí, allí tú estás. Si tomare las alas del alba
Y habitare en el extremo del mar, Aun allí me guiará tu mano, Y me
asirá tu diestra.
Dios te bendiga y que tengas un
excelente día
Anibal e
Iverka Burgos
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