Todos
pertenecemos a un tipo sanguíneo diferente, unos al grupo A, otros al B y otros
al O, pero cuando alguien tiene insuficiencia de sangre es necesario solicitar
donantes, que son aquellas personas que cumplen con ciertos requisitos y grados
de compatibilidad sanguínea con la persona que la requiere. Otras veces esa
insuficiencia puede suplirse a través de medicamentos o sustitutos dependiendo
de la gravedad del asunto.
Situaciones
como la anterior podría NO afectarnos a todos, en cambio hay una que SI NOS AFECTA A
TODOS y que se hace imprescindible
practicar una transfusión. Todos nacimos infectados por una enfermedad mortal
que se llama el pecado y SOLO la Sangre de Jesús puede limpiarnos. Es mediante ella que tenemos entrada al
Reino de los Cielos y SOLO a través de ella un día podremos ver cara a
cara a Dios. SOLO ella nos mantiene pegados a Jesús y al amor de Dios
POR SIEMPRE. Hebreos 13:12 Del mismo modo, Jesús murió fuera de la ciudad
de Jerusalén para que, por medio de su sangre, Dios perdonara a su pueblo. Romanos 8:39: ¡Nada,
absolutamente nada, podrá separarnos del amor que Dios nos ha mostrado por
medio de nuestro Señor Jesucristo!
SOLO LA SANGRE DE CRISTO NOS DA ENTRADA AL TRONO DE DIOS
Oración: Señor, que
tu sangre fluya por nuestras venas y que nos limpie de toda maldad. En el
nombre de Jesús, amén.
Anibal e Iverka Burgos
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